Podemos definir la economía circular como un sistema económico y social que tiene como objetivo la producción de bienes y servicios al tiempo que reduce el consumo y el desperdicio de materias primas, agua y fuentes de energía. El último fin de la economía circular es aprovechar al máximo los recursos materiales de los que disponemos alargando el ciclo de vida de los productos e imitando el funcionamiento de la Naturaleza donde todo tiene valor y se aprovecha.
Todos los procesos de fabricación implican un coste ambiental que puede calcularse. Desde que a inicios del siglo XIX se iniciara la industrialización, el coste ambiental se ha multiplicado de forma exponencial hasta llegar al punto de haber dado lugar a una nueva época geológica: El Antropoceno, una época en la que el impacto global de las actividades humanas ha tenido y tiene graves consecuencias en los ecosistemas terrestres.
Para minimizar esos daños y poder retroceder al Holoceno, la economía circular promueve la optimización de los materiales y residuos, alargando su vida útil (al contrario que la famosa obsolescencia programada que fomenta consumos continuos). Lograr una mejor gestión de los residuos, la reducción del calentamiento global y evitar un exceso de consumo de recursos son otros de los objetivos que busca la economía circular.
Aunque las medidas han de tomarse a nivel global y los gobiernos deben implicarse en ello. Todos podemos, en nuestra medida, contribuir a que la economía circular cobre cada vez más peso. Te damos algunas pistas:
- Repara antes que tirar.
- Elige lo duradero frente a lo desechable.
- Reduce tu basura al mínimo.
- Haz la lista de la compra antes de ir a comprar.
- Prueba a compostar en tu propia casa.
- Ajusta al máximo el gasto energético.
- Compra de segunda mano y da otra vida a bienes que otros no usan.
- En los restaurantes pide que empaqueten la comida que te sobre para llevar.
Oportunidades que ofrece la economía circular
Ser más respetuosos con el medio ambiente y la sociedad no implica dejar de crecer o de buscar oportunidades de negocio. Todo lo contrario, el nuevo modelo de economía circular supone una sustancial mejora tanto para las empresas como para para los consumidores. De hecho, reutilizar los recursos resulta mucho más rentable que crearlos desde cero con lo que los precios de producción se reducen. Así el precio de venta también se ve rebajado, beneficiando al consumidor. Aumentar la innovación, mejorar la reputación o atraer inversiones responsables son otras de las ventajas que ofrece la economía circular. Como ves, abogar por materiales biodegradables, también llamados eco-friendly, que vuelven a la naturaleza sin causar daños al medio ambiente es la mejor opción para empresas e industrias pero también para el conjunto de la sociedad y el Planeta.