BIOCOMPOSITE: EL MATERIAL DEL FUTURO

En un mundo cada vez más concienciado con la necesidad de cuidar el Medio Ambiente y en una búsqueda continua por hallar materiales más sostenibles y resistentes, los biocomposites están de moda. No es de extrañar ya que pueden aplicarse en múltiples sectores como la automoción, la construcción, la aeronáutica, el mobiliario o el menaje, entre otros. De hecho, actualmente muchas partes interiores de los vehículos ya están fabricadas utilizando biocomposites formados por polímeros tradicionales derivados del petróleo pero reforzados con diferentes fibras.

Diversos estudios indican que el uso de los biocomposites, lejos de ser una moda pasajera, va a seguir creciendo en los próximos años tanto en las aplicaciones en las que ya se viene utilizando así como en nuevos productos. Cada vez será más habitual encontrarnos desde instrumentos musicales hasta sillas o macetas fabricados con estos materiales. Pero veamos con más detalle en qué consiste este innovador material.

¿Qúe es el biocomposite?

Conocido también como biocompuesto, el biocomposite es un material formado por resina y un refuerzo de fibras naturales. Estos materiales se emplean es diferentes sectores industrales en sustitución de materiales más clásicos o convencionales como pueden ser como el acero, el hierro o el aluminio.

El origen del refuerzo de fibras naturales del que hablábamos puede ser muy variado desde lino, yute o cáñamo hasta materiales compuestos naturales como los polvos de huesos y cáscaras de fruta que son una excelente alternativa a las fibras sintéticas. Sustituir metales, plásticos y otros derivados del petróleo por este tipo de materiales más ecológicos y naturales responde al interés del público en general por ser más respetuosos con la naturaleza siendo conscientes de que muchos de sus recursos son limitados.  Y es que sin duda el uso de del biocomposite basado en subproductos agrícolas es un paso fundamental hacia un futuro sostenible y respetuoso con el Planeta.

Cualidades del bicomposite.

Algunas de las cualidades de los biocompuestos, al margen de su carácter ecológico, son las siguientes: son resistentes, duraderos, no requieren los cuidados de la madera, ofrecen baja densidad, tienen alta resistencia a la corrosión y a las temperaturas y permiten una gran versatilidad en el diseño y desempeño de la ingeniería.

Otro rasgo importante es que los productos realizados con estos materiales pueden ser fácilmente reciclados en numerosas ocasiones.

Origen del biocomposite.

Aunque pudiera parecer que estos materiales son completamente nuevos y se siga investigando e innovando en torno a ellos, lo cierto es que desde hace siglos la propia Naturaleza, que es sabia, ya los produce. Hablamos, por ejemplo, del nácar o los mismos huesos que forman el cuerpo. El ser humano también ha creado biocompuestos desde la Antigüedad como es el caso del adobe a partir de barro y paja.

Actualmente se ha logrado que los biocomposites tengan unas cualidades y utilidades específicas estudiando al detalle las distintas variantes en cuanto a proporción, cantidades, geometría o tamaño. De este modo nos encontramos con una variedad de materiales impensables hasta hace poco que pueden aplicarse en cualquier sector.